Zulena Alexandra Rosero Erazo (España)

1. ¿A qué te dedicas actualmente y cuál es tu formación?

Actualmente, me dedico principalmente al coaching, la gestión del cambio y procesos.

Soy Ingeniera Ambiental con un Máster en Calidad, Seguridad y Ambiente de la Universidad Central del Ecuador. Además, poseo un Máster en Direccionamiento Directivo e Inteligencia Emocional de la EAE Business School y la Universidad Politécnica de Cataluña en España.

Mi carrera abarca una amplia gama de disciplinas, y actualmente, me encuentro involucrada en diversas iniciativas relacionadas con el empoderamiento femenino y el desarrollo sostenible.

Soy la Consultora, Mentora, Coaching y CEO de Zaros-Latam, una empresa Consultora estratégica internacional que acompaña a los líderes a Co-descubrir, diseñar y desarrollar soluciones para transformar sus organizaciones equilibrando una visión empleado-céntrica y cliente-céntrica, lo que necesariamente implica fomentar una cultura de crecimiento basada en la innovación, la equidad y diversidad.

2. ¿Cuáles han sido tus principales desafíos como mujer en posiciones directivas?

Uno de los principales retos que he enfrentado como mujer ha sido superar estereotipos de género en entornos profesionales, especialmente en áreas de decisión, al ocupar altos cargos directivos y que este conformado por mayoría hombres.

Aprendí a desafiar las expectativas y a confiar en mis habilidades, demostrando que las mujeres podemos destacarnos en cualquier campo, aprendí la importancia de la determinación, perseverancia y centrarme en lo que realmente importa. A pesar de los miedos, mantuve una mentalidad positiva y prosperé en mi carrera, obteniendo ascensos formales y reconocimientos por mi liderazgo.

Además al haber empezado mi camino profesional en España me ayudo a valorar cada una de las culturas, costumbres pero sobre todo a los seres humanos que somos, no importa el origen, edad, condición social.

3. ¿Cómo has abordado la posible dificultad por tu género en el ámbito profesional?

Aunque he enfrentado desafíos, no creo que mi condición de género haya dificultado mi desempeño profesional.

Más bien, he utilizado estas experiencias como oportunidades para crecer y contribuir al cambio y les quiero compartir algunos de ellos. Desde el inicio de mi carrera, he trabajado incansablemente para destacar mi competencia y conocimiento en mi área. Creo firmemente que la excelencia profesional es clave para desafiar estereotipos de género.

Mantener una actitud positiva y segura ha sido fundamental. A pesar de posibles prejuicios, he creído en mis capacidades y en mi capacidad para superar cualquier barrera basada en el género.

Entendí la importancia de contar con mentores sólidos y activamente busqué orientación y apoyo en mi carrera. La mentoría es esencial para el desarrollo profesional y puede ser valiosa para superar desafíos de género.

Participé activamente en conversaciones y actividades que apoyan la igualdad de género en el entorno laboral. Contribuí a crear conciencia sobre la importancia de un trato equitativo y oportunidades iguales para hombres y mujeres. Actualmente tengo un programa denominado LIDERA DESDE TU ESENCIA.

En entornos donde la cultura organizacional no era inclusiva, me esforcé por romper esas barreras. Participé en iniciativas que promovían la diversidad y he apoyado en prácticas laborales que beneficiaran a todos, independientemente del género, además he realizado varios seminarios en las que se destaca la diversidad.

Me he esforzado por educar a mis compañeros, clientes, proveedores sobre la importancia de empoderar a las mujeres en el lugar de trabajo. Compartí información sobre los beneficios de la diversidad de género y cómo contribuye al éxito organizacional. Ahora trabajo realizando los Planes de Igualdad para impulsar la Ley de Economía Violeta.

En resumen, he tomado medidas proactivas para abordar las dificultades basadas en el género, buscando apoyo, promoviendo un entorno laboral más inclusivo y equitativo, y abogando por la igualdad de oportunidades. Mi compromiso sigue siendo el de contribuir a la construcción de un entorno profesional más justo e igualitario para todas las personas, independientemente de su género.

4. ¿Cuál fue tu desafío más difícil y cómo lo superaste en un entorno mayoritariamente masculino?

Enfrentar un entorno laboral mayoritariamente masculino fue un desafío significativo que abordé demostrando constantemente mi competencia y habilidades.

A pesar de la desconfianza inicial y los estereotipos de género, me enfoqué en entregar resultados tangibles, mantuve una actitud resiliente y convertí los desafíos en oportunidades de crecimiento. Busqué mentores y defensores, participé en iniciativas de igualdad de género y promoví cambios en políticas organizacionales.

Con el tiempo, mi perseverancia y participación activa contribuyeron a cambiar la percepción sobre las capacidades de las mujeres en roles de liderazgo, logrando ascensos y reconocimientos.

Este proceso no solo fortaleció mi posición, sino que también contribuyó a crear un entorno más equitativo.

5. ¿Cómo percibes el desarrollo del liderazgo femenino en América y cuáles son los desafíos actuales?

Como mujer, observo de cerca los desafíos que enfrentamos en el ámbito laboral en América Latina y cómo estos afectan el liderazgo femenino. Aunque hemos avanzado, la brecha de género persiste en roles directivos. Me he encontrado con obstáculos para acceder a posiciones ejecutivas, enfrentando percepciones arraigadas de que ciertos roles son más adecuados para hombres.

Los estereotipos de género también juegan un papel crucial. La creencia de que algunas industrias son más aptas para hombres limita nuestras oportunidades. Además, en algunas organizaciones, la cultura laboral no es inclusiva. Reuniones fuera del horario laboral y entornos poco amigables para la vida familiar pueden afectar negativamente nuestra participación.

La falta de mentoría y redes profesionales también impacta. Establecer conexiones sólidas es esencial, y la escasez de estas oportunidades afecta nuestra progresión profesional. Además, la persistente desigualdad salarial y la dificultad para lograr un equilibrio entre el trabajo y la vida personal son desafíos que enfrentamos diariamente.

Superar estos desafíos requiere un esfuerzo continuo para promover la igualdad de oportunidades y la diversidad. El respaldo gubernamental y empresarial es esencial para crear entornos propicios para el liderazgo femenino.

Como mujeres líderes, podemos desempeñar un papel crucial compartiendo nuestras experiencias y sirviendo de inspiración para las generaciones futuras. Está en nuestras manos allanar el camino para un futuro más equitativo e inclusivo.

6. ¿Puedes destacar una lección de liderazgo que consideres fundamental?

Una lección de liderazgo que destaco es la importancia de la resiliencia. Me inspira la historia de mujeres líderes que, a pesar de los obstáculos, han mantenido su determinación y han logrado un impacto significativo. Su capacidad para adaptarse y superar desafíos me motiva a seguir adelante en mi propio camino.

En el emocionante viaje de mi carrera, inicié como ingeniera y consultora en 2008 y sin conocer completamente el desafío que se presentaba al reestructurar la principal empresa petrolera del Ecuador. Con determinación y autodidacta, asumí un rol clave en transformar la organización, liderando cambios estratégicos, gestión de recursos humanos y gestión del cambio. A los 25 años, integré el equipo directivo, superando miedos y demostrando mi valía.

La experiencia evolucionó cuando en 2011 fui convocada al EQUIPO DE GOBIERNO, y desde 2013, como Directora y Subsecretaria de GESTIÓN DEL CAMBIO a nivel estatal. Aprendí que el cambio real implica compromiso y liderazgo. Durante estos 15 años, he dirigido proyectos estratégicos, implementados modelos innovadores y herramientas modernas, forjándome como líder. Rompí creencias sobre mi formación y demostré que el objetivo no es solo ascender, sino destacar mis habilidades y mejorar continuamente.

A lo largo de esta travesía, descubrí que hacerse notar, levantar la mano y expresar ideas valiosas es esencial. Aunque inicialmente temía hablar, aprendí que la aprobación de mi jefe no era la única validación. Mi participación activa en reuniones y la presentación de proyectos valiosos me atrajeron apoyo y reconocimiento.

Esta etapa de mi carrera me enseñó que, al igual que las organizaciones, también necesitamos transformarnos, superar miedos y demostrar nuestro valor. Invito a todos a dejar atrás los paradigmas, abrirse a nuevas ideas y, con respeto y responsabilidad, ser agentes de cambio en nuestras vidas y entornos.

Sigamos desafiando límites, a ser líderes de sus propias vidas y contribuir a cambios positivos en la sociedad.

7. ¿Dónde pueden encontrarte para conectar o colaborar?

Pueden encontrarme a través de mi perfil en LinkedIn (linkedin.com/in/zulena-rosero), mi correo electrónico (zrosero2019@gmail.com), o visitando la página web de Zaros-Latam en www.zaros-latam.com.

Estoy abierta a la conexión y colaboración con profesionales comprometidos con el cambio positivo.

En la actualidad, sigo apoyando a empresas y personas en sus cambios. Además, me especializo en asesorar a mujeres que buscan oportunidades de crecimiento profesional y personal, invitándolas a romper barreras y liderar sus propias vidas.